POR: REDACCIÓN
La economía circular ayudaría a reducir hasta un 99% de los desechos de algunos sectores industriales. “Lo que para algunos es basura, para otros es un tesoro”, es el principio (burdo por supuesto) en el que se basa la economía circular, que, si la aplicáramos, podríamos contribuir a proteger el medio ambiente y combatir el cambio climático.
La crisis climática mundial es un tema que ha estado en boca de todos desde hace ya varios años y cada uno de nosotros hemos sido parte de este problema que se nos desborda de las manos y lo podemos ver a través de la contaminación, explosión demográfica, crisis de energías, inseguridad, escasez de recursos naturales, tala indiscriminada, la economía lineal, entre muchos otros factores en los que por supuesto somos completamente responsables, contribuyendo significativamente -y en mal plan-, en dejar una huella negativa en el planeta.
Aunque esto representa un panorama negro, también puede ser una oportunidad
de renovación, de repensar y rediseñar todo de principio a fin aplicando lo que hoy
se conoce como Economía Circular, afortunadamente los tiempos cambian y hay
quienes nos volvemos más consientes con el paso de los años y lo trasmitimos a
las nuevas generaciones, las cuales por supuesto están preocupadas y ocupadas
por revertir el cambio climático y sus consecuencias.
Y muchos se preguntarán que es esto o en qué consiste, y la respuesta es muy
simple, no dejemos morir los productos, evitemos productos de un solo uso y
procuremos reutilizarlos o reciclarlos, además de que desde el diseño inicial se
debería ampliar la vida útil de éstos para darles un uso más prolongado (mejor
calidad) y esto trae como consecuencia el cambiar la forma en la que actualmente
producimos y consumimos.
Esto también es algo que a todos los sectores les compete, es por esto que
empresas como Grupo Helvex, comprometidas con la calidad e innovación de sus
productos también tienen un compromiso con la preservación del medio ambiente,
por ejemplo, basado en varios estudios, el baño es el área donde existe un mayor
desperdicio de agua, y todos los productos de la marca Helvex están relacionados
con ella y es por ello que la empresa trabaja de manera constante en el desarrollo
de nuevos productos que contribuyan su optimización y ahorro.
Dos de sus principales innovaciones son el W.C. 2.5 que es el más ahorrador del
mundo y el mingitorio seco, que permiten ahorrar 20 440 litros de agua al año; en el
caso del primero hasta 30% menos que los inodoros comunes al añadir presión de
aire; y en el caso de los mingitorios, el desarrollo del dispositivo TDS ("tecnología
drena y sella") contribuyó a desmitificar su uso en los espacios públicos, pues a
través de una pelotita de plástico evita el paso de los malos olores. Dentro de la
gama también se encuentra la llave economizadora TV-105, seguro la ubicas más
por el pivotito, la cual tiene un mecanismo simple que no necesita energía adicional
para el ahorro, por lo que tiene un desempeño óptimo en lugares con baja presión.
La instalación de cada uno de estos muebles en el sector institucional representa
un ahorro de más de 160 mil litros de agua anuales. Además, la compañía tiene la
capacidad de reutilizar sus productos fabricados en latón. Cada una de estas
innovaciones se basa en los principios de un diseño centrado en las personas y la
economía circular.
Grupo Helvex al estar comprometido con la calidad, tiene un estricto proceso de
fabricación y manufactura, de la mano de las materias primas de la más alta calidad,
que al conjugarse ya en los procesos de fabricación y en caso de requerir sacarlas
durante dicho proceso para volver a iniciarlo, sin mayor problema se puede hacer,
porque tanto la calidad de los productos como los propios procesos lo permiten, de
tan manera que nada se desperdicia, todo se recicla y se reutiliza.
Seamos parte del cambio, replanteemos todo nuestro entorno operando en una
apertura de conciencia social, principalmente en nuestras conductas, costumbres y
hábitos cotidianos. Repensemos todo de principio a fin como un modelo circular.
Busquemos de qué manera le podemos dar un respiro al planeta, seamos juzgones
con aquellos que venden plásticos de un solo uso, con productos de mala calidad
que tengamos que estar cambiando constantemente porque ya no funcionan, con
las empresas y las marcas que no están contribuyendo positivamente en resolver el
problema en el que todos hemos participado.
Muchas compañías están conscientes de ello y saben el gran reto que representa
fomentar la economía circular como una solución y es justamente por esto que
Grupo Helvex busca que cada persona se convierta en parte de la solución, porque
la conservación del planeta comienza desde casa.