POR: TB
Todo está listo para la edición LVII del Super Bowl, a realizarse el próximo 12 de febrero en el State Farm Stadium en Glendale, Arizona, en el cual Philadelphia Eagles y Kansas City Chiefs disputarán la contienda para ganar el nuevo título deportivo.
Más de 112 millones de espectadores siguieron el partido, y de ellos, 10.6 millones fueron mexicanos, según la especialista en audiencias Nielsen.
Después de Acción de Gracias, el Super Bowl es la segunda fecha en que más comida consume la población de Estados Unidos, según el Instituto Americano de Distribución de Alimentos.
Las alitas de pollo destacan entre los platillos preferidos. El último registro destaca el consumo de 1.4 millones de piezas durante el partido de 2022.
En México, han ganado popularidad en los últimos años. La Cámara de Comercio de la Ciudad de México (Canacope), estimó el año pasado un incremento del 25% en el consumo de alitas, tacos de carne y alimentos específicos para este día.
Según la Unión Nacional de Avicultores (UNA), la producción nacional de pollo de engorda cerró en cerca de 3.8 millones de toneladas en 2022[1].
El consumo per cápita de pollo es de 33.6 kilos, incluyendo las alas.
El Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y de la Nutrición Animal (CONAFAB), destacó que la producción de alimento para pollo de engorda fue de 11 millones de toneladas en 2022.
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