Por: Liliana Hernández
Foto: Cortesía
Una de las cosas más maravillosas de viajar a Puerto Vallarta, no solo es la magia de sus playas o sus centros turísticos, sino la labor para la conservación y preservación de tortugas.
Como cada año, los visitantes son parte de la liberación de tortugas recién nacidas para que comiencen sus primeros pasos de aventura hacía lo que será su hogar en el océano Pacífico. Cumpliendo las medidas sanitarias preventivas que exigen los tiempos, es posible participar en esta actividad en alguno de los campamentos tortugueros que hay en el destino.
Una sensación que muchos deberían experimentar, ser parte de la naturaleza y la magia de liberar a su hábitat a estos hermosos animalitos. De mediados de agosto a diciembre hay liberaciones diarias de tortugas golfinas, la principal especie que llega a la bahía de Banderas.
En julio se liberan entre 100 y 200 al día pero posteriormente pueden llegar a ser hasta 500, luego de la eclosión de los huevos en los nidos que son vigilados por biólogos y voluntarios, a lo largo de las playas de Puerto Vallarta.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Durante las sesiones de liberación de tortugas se forman grupos de 30 personas, se respeta la sana distancia, se aplica gel antibacterial y se exige el uso de cubrebocas, luego de una plática sobre educación ambiental impartida por expertos, los asistentes reciben una cáscara de coco en la que se les entrega una tortuguita recién nacida, ya que no se debe manipular la especie con las manos.
Las liberaciones se realizan en los campamentos y en las playas de diversos hoteles, convirtiéndolo en un momento muy especial para los visitantes y la comunidad local, que ocurre al atardecer para evitar que depredadores naturales como las aves o los peces grandes las ataquen; una impresionante experiencia marcada por los más bellos atardeceres sobre el Pacífico, las tortuguitas posan sus aletas en la arena para iniciar su camino por la vida.
Participar en estas liberaciones es gratuito, pero si está en tus posibilidades puedes aportar una donación económica, para apoyar el trabajo de las asociaciones civiles que realizan esta actividad.
Las personas interesadas pueden también adoptar un nido, el cual llevará el nombre del adoptante. En cuanto nazcan las pequeñas tortuguitas se invita al “padrino” a acudir al campamento para realizar la liberación.
TORTUGAS PATASALADAS
Las tortugas golfinas llegan a diferentes playas de Puerto Vallarta y el Pacífico para desovar, enseguida, los huevos son trasladados a viveros seguros con vigilancia de la dirección municipal de Ecología, y de otros voluntarios de diferentes asociaciones.
Esta especie, como las ballenas jorobadas que llegan en invierno, adquieren un vínculo muy intenso con esta región, puesto que suelen volver de forma frecuente.
Durante el año anterior, los diferentes campamentos y voluntarios lograron integran más de 2800 nidos de donde liberaron a unas 200,000 crías, números bastante alentadores si consideramos que según las estadísticas, de cada 1000 tortuguitas solo una llega a la edad adulta.
Recuerda que si durante tu estancia aquí encuentras alguna tortuga en la playa, es importante guardar una distancia aproximada de 7 metros, no tomar fotos con flash ya que pueden asustarse, y, sobre todo, no molestarlas ya que se puede interrumpir el desove.
No esperes más y vive esta experiencia maravillosa.
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