POR: LILIANA HERNÁNDEZ
FOTO: CORTESÍA
De la mano del afamado productor Kiko Cibrián, el joven intérprete José Maria, nos muestra uno de sus lados más apasionados a la hora de crear música. El romanticismo se ha convertido en su principal estandarte, mismo que refleja en el tema "Se te olvido".
"Es una experiencia que no es propia, pero que sí me ha pasado, es la historia de una amiga de muchos años, en una noche de tequilas me cuenta la historia, yo la veía llorar y me dio mucho coraje, porque no solo me ha pasado, lo he hecho, también he sido la parte que se aleja sin dar explicaciones".
Señala que conforme ha pasado el tiempo y su carrera ha ido en ascenso, ha podido descubrir nuevas facetas cómo intérprete, pero sobre todo, en la parte del amor, ya que considera su día a día, está un tanto alejado de lo que narra en sus letras.
"Escucho a veces las canciones y digo, ¡Yo no soy tan romántico!, pero a través de la música he podido encontrar esa forma de expresión que a veces nos hace falta, le compuse una canción a mi esposa, expresándole lo que muchas veces de frente no se lo digo".
Una de sus mayores fortalezas, es cuando alguien llega a decirle que se sintió identificado con alguno de sus temas, lo que figura como su mayor recompensa.
Trabajar al lado de Kiko ha sido una de las mejores experiencias que ha tenido.
"Es un hombre lleno de historias,, yo soy fan de Luis Miguel de hueso colorado y me compartía todas las vivencias que tuvo, y lo que mas agarre de él, es la fe que tiene en como te dice las cosas, es un hombre que no quita la sonrisa aunque haya tenido el peor de los días", menciona.
Para este álbum, dijo que no tuvo tanta participación, ya que el control total lo tuvo Kiko, fue difícil, sin embargo, al escuchar sus temas con todos los arreglos, sin duda, fue mejor de lo que esperaba.
"Estoy en el comienzo de algo que puede llegar a ser maravilloso, todo esto es si tenemos disciplina, amor y soy una persona dispuesta. tengo 15 años tratando de sacar la cabeza y esta es la oportunidad más clara que he tenido y no la pienso desperdiciar".
Actualmente, José Maria se encarga de abrir los conciertos que son parte de la gira de despedida de su padre, José María Napoleón, momentos que marcarán su carrera para siempre, y ahora disfruta tanto de ese público, que no piensa desaprovechar esa oportunidad.
De un niño que jugaba con un micrófono en el espejo, ha pasado a ser una fiel promesa de la música, entregando lo mejor de sí y haciendo énfasis en que los sueños si se cumplen.
"Yo quería esto y agradezco al niño que era, aquel que soñaba en grande y que ahora estoy cumpliendo cada uno de esos sueños".